“La educación, sin
límites temporales ni espaciales, se convierta entonces en una dimensión de la
vida misma”
Antes de leer
a Delors, estuve investigando un poco sobre quién era…y quedé impresionada. Lo
que en un principio me llamó mucho la atención fue el año en que nació. Es del
mismo año que mi abuela…una gran mujer con la que aún puedo conversar, y que
siempre ha tenido muy en cuenta el valor de la educación. Ella se sabe de memoria
muchas cosas, pero especialmente el nombre y apellidos de su maestra. A ella le
debe, según mi abuela, mucho de lo que ella es…porque fue quien la enseñó a
leer y a escribir.
Luego me
dispuse a leer el texto, bastante ameno por cierto, de Delors. Escuché y leí el
resumen que se hizo en clase del mismo...e imaginé si esas palabras que
escuchamos, en especial esos cuatro pilares que se han leído en la UNESCO y que
tanto valor tienen para el mundo en la formación de seres humanos, se dieran
actualmente en nuestra sociedad. Si esta tan claro…¿por qué no llevarlos a
cabo?
Me da la
sensación de que sabemos las necesidades y huecos que hay en la educación y los
seguimos dejando en blanco…quizá es porque la relación entre la política y la
educación deberían ser temas a parte.
Hay varias
dificultades que deben superarse:
-
Las resistencias entre la competitividad formativa y la igualdad de
oportunidades. Muchas personas apuestan más por una educación que prepare en
competitividad que en convivencia con los otros/as. Pero en la vida, no hay dos
seres humanos iguales, al igual que las clases de alumnos/as que llaman
“normales”.
-
Otra dificultad sería la apretada educación que se hace llamar básica y que
se lleva impartiendo siempre y que no desea ver cambios de innovación. Creo que
resulta muy complicado innovar.
-
Otra incongruencia es la separación de las ideas propias que te identifican
como persona y lo que se transmite en el medio educativo. Y educar en “lo
diferente y distinto”, ya no solo en necesidades especiales, sino en ideas,
pensamientos, ideologías, culturas…diferente.
“Todo invita a revalorizar los aspectos éticos y culturales de la
educación, y para ello dar a cada uno los medios de comprender al otro en su
particularidad y comprender el mundo en su curso caótico hacia una cierta
unidad. Pero hace falta además empezar por comprenderse a sí mismo en esta
suerte de viaje interior jalonado por el conocimiento, la meditación y el
ejercicio de la autocrítica”.
La educación
debería ser un vehículo para resolver necesidades de la población y no quedarse
anclada a enfoques en vía de extinción que no resuelven nada.
Aprender a ser, creo que es muy importante saber quién
eres…pero también lo es saber hacer
una tarea que vaya acorde con lo que eres…en lo que puedas desarrollarte como
persona. Y para ello tenemos que aprehender
del conocimiento. Quizá no solo del que nos viene dado de un lugar como
puede ser la escuela, sino de todo el conjunto e infinidad de espacios en el
que se desarrolla un ser humano. Y de esa manera, poder decir que nos enriquecemos unos de otros…que al fin y
al cabo es lo que nos une.
Pero lo que
más me llama la atención es pensar que la educación es algo permanente. Que no
se queda anclada en un momento determinado. Puede que un tipo de educación si
se quedé, necesariamente, por el desarrollo cognitivo en un lugar concreto del
tiempo de una persona…pero no hay que desprestigiar el resto de aprendizaje.
En el informe
Delors abre las puertas de la universidad a una educación continuada y permanente.
Aquí, en la
Universidad de Alcalá, hay una educación para personas mayores en la
universidad. No sigue una educación reglada, se escapa por la vía de lo no
formal, pero proporciona esa educación de la que habla Delors.
Como
plataforma privilegiada de la educación durante toda la vida, al abrir sus
puertas a los adultos que quieran reanudar sus estudios, adaptar y enriquecer
sus conocimientos o satisfacer sus necesidad de aprender en todos los ámbitos
de la vida cultural.
Los docentes tienen un gran
trabajo también de por medio: formarse de forma continua. Enseñar realmente
competencias válidas para el mundo actual. Tal vez habría que volver a las
fábulas de cuando en cuando y permitir que sean ellas quienes nos den a conocer
el tesoro que encierran…como sucede en la fábula de Esopo de: “El labrador y
sus hijos”.
Además están esos espacios por
explorar donde la innovación tiene mucho que hacer.
Me estremezco al pensar las
miles de personas, de niños y niñas que no reciben educación. Hay 900 millones
de personas adultas analfabetas, y 130 de menosres que tampoco reciben
educación en la infancia (me gustaría saber cuántos de éstos menores son
niñas”.
Hay un libro “Tres tazas de
té” muy recomendable, porque habla de un programa de educación a niñas en el
norte de Pakistan. Es la historia de un alpinista que después de vivir una
experiencia en la que casi pierde la vida, en su proceso de curación, descubre
a los niños y niñas del norte de Pakistan (Korphe). Este hombre, Greg
Mortenson, decidió dedicar su vida a ofrecer un programa de educación a los
niños y a las niñas de aquél lugar escondido.
Pero desgraciadamente, he
encontrado hace poco páginas en internet donde se acusa a Gerg Montensen de no
haber creado las escuelas que prometió a través de su ONG.
Aquí dejo un enlace de una
noticia que he encontrado en español. Hay más noticias en inglés.

Leí el libro, y la propuesta
educativa es muy interesante. Quizá sea un sueño y aún está por cumplirse…pero
como dice Delors en uno de los enunciados de su informe, “¿la educación o la
utopía necesaria?”
En clase hemos comentado el
inmovilismo del profesorado en la práctica educativa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario